-Y
así es como logras obtener la longitud vectorial de una superficie…
¿Entendiste?
Wrath
ladeo la cabeza y sonrió tiernamente como respuesta. Mandy solo pudo rodar los
ojos y superar después de eso.
Bien,
estaba tratando de mostrarse tranquila y de no entrar en pánico, pero si él
seguía haciendo esa clase de gestos estaba segura de que fallaría en su
patético intento. Aclaro su garganta y volvió a posar la vista en el libro que
estaba sobre sus piernas. Llevaban
“estudiando” física al menos 15 minutos, pero muy en el fondo ambos
sabían perfectamente lo que verdaderamente pasaba. No hacían más que provocarse
a sí mismos, no hacían más que llamarse a gritos con sus miradas.
Paso
saliva y trato de comprender el texto que seguía por leer, pero el intento fue
en vano. En lo único que podía pensar era en que Wrath estaba a tan solo uno
centímetros de ella, en que si fuera un poco más valiente podría acercarse y
besarlo. “Vamos, solo respira, solo trata de respirar”, se dijo conforme
escribía unos cuantos garabatos en uno de los cuadernos. No podía ser obvia, no
en ese momento. Necesitaban hablar, necesitaban…
-¿Sucede
algo?...-Wrath rompió el silencio algo preocupado. Amanda negó sin dejar de
escribir-…¿Segura?, te ves un poco mareada.
-Estoy
bien…-Aseguro sonriente al alzar la vista-…Solo estoy algo cansada.
-Podemos
hacer una pausa si lo deseas.
-¿Pausa?...-Mandy
repitió la palabra con nerviosismo. No podría controlarse si no mantenía su
mente ocupada-…Estoy bien Wrath, sigamos.
-¿Esto
será así siempre?
-¿Disculpa?
-¿Por
qué no bajamos la guardia un momento Mandy?...-Él trato de no mostrar dolor en
su voz-…No sigamos con esto por favor.
-No
sé a qué te refieres, tú eras el que quería estudiar física.
-No
Mandy, no quería estudiar física, lo que quería era pasar tiempo contigo…-El
silencio reino, ambos se miraron-…Esto era un plan, ¡Idee un plan que no me
hiciera ver como un maldito niño infantil y necesitado!
-¿Por
qué no solo lo dijiste?...-Mandy se encogió de hombros. Sabía que aquello era una
de las cosas más estúpidas que había dicho en la vida-…Creo que eso hubiera
sido un poco más fácil para ambos.
-¿Tengo
que recordarte que no quería tenerme cerca?
-No,
no tienes que hacerlo… ¿Y sabes?, si quería tenerte cerca, lo quería más de lo
que puedes imaginarte.
La
expresión de Wrath se congelo al instante, lo cual obligo a Mandy a ponerse de
pie y alejarse, había hablado de más, ¡Había abierto la maldita boca!
Trastabillo
hasta una de las ventanas y tomo aire desesperadamente. Aquello parecía una
confesión patética a simple vista, pero era todo lo contrario, para ella
aquello era la llave a sus más obscuros secretos. Aferro sus manos al marco de
la ventana y literalmente saco la cabeza por ella. Necesitaba aire, necesitaba
calmarse, ¡Necesitaba salir de ahí!..
¿Podría librarse de esa?, ¿Podría inventarse alguna estupidez para que
él se alejara?
Wrath
leyó sus intenciones al mirar su rigidez y de inmediato se puso de pie. No iba
a permitir que ella se echara hacia atrás, no cuando había dado un gran paso
justo frente a sus ojos. “No bajes la guardia, aun cuando la ames, no bajes la
guardia”, se recordó a si mismo antes de comenzar a caminar. Justin se lo había
dicho, tenía que ser duro, tenía que comportarse como un hombre si quería ser
tratado como tal. No importaba nada, no iba a salir de aquella habitación sin
dejar en claro todo lo que había escondido entre ambos.
-¿Sabes?,
pensándolo bien, creo que no me siento bien…-Ella se dio vuelta aparentando
estar desecha-… ¿Por qué no dejamos el estudio para otra ocasión?, podríamos…
-No.
-Pero…
-Dije
que no…-Wrath pudo haber reído por la expresión impactada de Mandy pero a
cambio de eso simplemente se cruzó de brazos. Ella lo había dicho, “No más
huidas”-…No sé tú, pero yo estoy harto de este juego.
-No
sé a qué te refieres.
-Sí,
si lo haces…-Aseguro con brusquedad-…Y vamos a hablar de ello de una vez
por todas.
-Wrath
por favor…-Imploro Amanda comenzando a entrar en pánico-…No me hagas esto, no
ahora.
-No
Mandy, tú no me lo hagas a mi…Esto es insoportable, no puedo más.
-Bien,
pues entonces dejémoslo así.
-Sabes
perfectamente que no podemos hace eso, sabes perfectamente que solo hay una
solución.
-Yo
no, yo…-Los ojos verdes de Mandy comenzaron a aguadarse-…Esto no es fácil
Wrath… ¡Esto es más difícil para mí de lo que piensas!
-¿Por
qué?...-Reprocho tratando de mantener la calma. Estaba comenzando a sofocarse-…
¿Acaso soy repugnante?, ¿Soy tan poca cosa?, ¿Te doy vergüenza?
-¡Cállate
Wrath!...-Ordeno ella tan fieramente que hubo un pequeño eco. ¡Como rayos el
podía decir eso!-….Solo cállate, no sabes nada.
-¡Entonces
dímelo!...-Exigió con el mismo tono de voz-…Dímelo, porque esta maldita
incertidumbre me está destrozando.
-¡No
eres tu Wrath!...-Grito y con eso las lágrimas comenzaron a correr por su
mejillas-…No eres tú, soy yo… ¡Yo soy el maldito problema!
Se
cubrió el rostro con las manos después de eso y trató de amortiguar su
lloriqueo, sabía que no era tiempo de echarse a llorar, tenia que ser fuerte,
tenía que ser la Mandy orgullosa y fría que había sido antes de amarlo, pero no
podía, por alguna razón se estaba cayendo a pedazos.
Trago
con fuerza y con odio hacia sí misma limpio el agua de su cara. Él iba a
alejarse en cuanto supiera el por qué ella era el “problema”, el por fin
razonaría y se iría, la dejaría sola, pero tenía razón, no podía seguir de
aquella manera, era mejor terminar con todo de una maldita vez.
Wrath
dio un paso y con eso logro reaccionar. Al ver la decisión en su mirada solo
pudo alzar la mano y prohibirle que se acercara mucho más. Lo necesitaba lejos,
así el adiós sería más soportable.
-¿Alguna
vez te has preguntado que siento cuando te veo?
-No…-Wrath
paso saliva. Aquellas palabras habían sido suficiente para dejarlo clavado al
suelo-
-Bueno,
es un momento de que lo sepas…-Mandy cerró los ojos con fuerza y
culpabilidad-…Siento amor, siento felicidad, siento un sinfín de sensaciones
que jamás en mi vida había sentido…-Hizo una pausa y sonrió-…Pero es normal que
sienta eso, después de todo, tu eres…Eres el hombre más maravilloso que he conocido.
-Mandy…
-Eres
tierno, responsable, caballeroso, protector, listo, fuerte, sexy…-La voz se le
quebró involuntariamente-…Eres simplemente perfecto, eres todo, todo para mí,
pero… ¿Yo que soy?, yo no soy nada.
-¡Basta!...-Advirtió
él mordazmente. Su felicidad se había roto por completo-…Tu eres…
-No
soy más que una Zorra hipócrita…-Escupió con asco, un asco palpable-…Una chica
fría, orgullosa, engreída pervertida….Una chica manchada por un asqueroso
pasado.
-¡J*der!,
cierra la boca!
-No
mereces a alguien como yo Wrath…-Amanda lo fulmino con la mirada y trago sus
lágrimas con desesperación-…Por muy doloroso que sea para mí, no mereces tanta
mierd* y eso es lo único que soy, no voy
a hacer tan egoísta como para permitirte que arruines tu vida, no con una
asquerosa…
-¡Cierra
la maldita boca o juro que te la cerrare yo!
El
grito de Wrath fue acompañado por un estruendo. Cuando Amanda parpadeo y de dio
cuenta de lo que pasaba se quedó sin habla. El había golpeado la mesa de noche
que tenía a un costado con el puño y por lo que podía ver había roto algunas
cosas en el acto, aunque si era sincera consigo misma eso no era lo que la
tenía sorprendida, lo que la impactaba era lo forma en la que él había gritado.
Wrath no era agresivo, Wrath no alzaba la voz, pero no ese momento parecía ser
otra persona, una persona completamente fuera de sí. Estaba completamente
agitado y tenso, su pecho subía y bajaba constantemente, sin contar que su piel
tenía un tono rojizo y su mirada era colérica. “¿Quién rayos es este chico?”,
se preguntó conforme trataba de controlar el temblor de sus manos.
-Yo…
-¡Cállate!,
¿por el amor de dios, solo guarda silencio una vez en tu vida!...-Ordeno él
frenético y rabiando-…Estoy harto de esta mierd*, ¡Estoy harto de que decidas
por mí!, ¡Estoy harto de que solo escuches tu punto de vista y no te detengas a
pensar en los demás!.
-Wrath
cálmate…-A Mandy le tembló la voz. Nunca lo había visto de aquel modo-…Wrath…
-No,
¡No voy a calmarme!, ¿Y sabes por qué?...Porque he callado en todo este tiempo
y no pienso hacerlo más… ¡No voy a permitir que nos sigas manteniendo separados
por una estupidez!
-¡No
es una estupidez!
-¡Si,
si lo es!...-Wrath se acercó a ella amenazantemente y solo paro hasta tenerla a
pocos centímetros de el-…Me has estado evitando, nos has alejado, hemos sufrido
y todo por una maldita cuestión moral que solo me concierne a mí, ¿Escuchaste?,
¡Solo a mí!
-No
importa lo que digas…-Ella negó sin dejar de mirarlo a los ojos-…No voy a
permitir que arruines tu vida estando conmigo.
-Pues
es una lástima, tal vez tu no lo permitas pero yo sí.
-¡Basta!,
basta Wrath… ¡Deja de compórtate como un niño!
-¡Eso es lo que hago!...-Gruño con los ojos ardiendo-…Estoy dejando de ser un niño, estoy siendo lo suficientemente maduro como para pararme frente a ti y decirte que te amo sin poner excusas de por medio, cosa que tu no haces.
-¡Eso es lo que hago!...-Gruño con los ojos ardiendo-…Estoy dejando de ser un niño, estoy siendo lo suficientemente maduro como para pararme frente a ti y decirte que te amo sin poner excusas de por medio, cosa que tu no haces.
-No
lo hago porque no puedo permitírmelo…-Mandy cedió ante los gritos y decidió
susurrar. Aquello la estaba matando-… ¡Mírame Wrath!, soy una chica de 20 años,
una chica que ha salido con miles de tipos, una chica que tiene un maldito
trauma psicológico por que estuvo a punto de ser violada…-El dio un respingo y
apretó los puños tras la palabra “Violación”-…Tengo mierd* en mi cabeza Wrath,
no sé si voy a poder soportar estar cerca de ti y ¿sabes por qué?, porque cada
vez que me acerco a ti me siento sucia, siento como si fuera aquel maldito
bastardo y tu fueras yo…Siento que voy a manchar todo lo perfecto en ti con mis
problemas…¡Si, te amo!, nunca había sentido esto, pero no voy a arruinarte como
a mí me arruinaron.
Wrath
la miro por un largo tiempo después de que ella hubiera terminado, luego y sin
poderle encontrar algún sentido a las palabras que había escuchado volvió a
golpear la mesa que tenía a un costado. El dolor le recorrido el brazo con
fuertes ondas de ardor, pero no le importo, en ese instante no le importaba más
que desquitar toda la ira que tenía dentro. Todo aquel dolor, toda aquella
inseguridad por parte de ella había sido provocada por aquel hijo de put*, por
el bastardo que había tratad dañarla. Cerró los ojos momentariamente y sintió
como pequeñas gotas de agua comenzaban
resbalar por sus mejillas. No podía evitar pensar en el dolor y el miedo
que ella había sentido en aquella brutal ocasión. Maldijo y se llevó las manos
a la cabeza. No sabía cómo o cuando, pero de una cosa estaba seguro,
encontraría a aquel bastardo a como diera lugar y lo mataría, lo asesinaría con
sus propias manos hasta que no quedara ningún aliento de vida en él.
Amanda
dio un par de pasos hacia la puerta y eso lo hizo volver en sí. Era extraño,
era como si fuera capaz de prevenir cada movimiento que ella hacía, como si
estuvieran conectados. Ella iba a huir,
lo supo de inmediato.
-No
me importa…-Él hablo con seguridad y arrogancia. Mandy se detuvo en seco y lo
miro sobre el hombro-…No me importa nada de eso, lo único que sé es que te amo
y que no pienso moverme de este lugar hasta que terminemos como es debido.
-¿Por
qué no te rindes?, ¡Por que no simplemente aceptas lo que digo y te vas!...-Lo
encaro. Nunca antes se había sentido tan devastada- …Por favor Wrath.
-No.
-¡Con
una mierd*!
-Solo
diré tres cosas Amanda…Numero uno, te amo…Numero dos, eres más que una chica
con problemas, tu eres todo lo que necesito…Número tres, creo que ya hemos
hablado suficiente.
Estuvo
frente a ella en menos de un segundo, pero después de eso no se movió, ni
siquiera la toco, solo la miro. Mandy se estremeció de pies a cabeza con tan
solo mirarlo a los ojos, lo cual empezó a preocuparle. Si así se ponía con una
simple mirada, ¿Qué pasaría si la tocaba?, tenía que alejarse de él, no tenía
ni idea de cuál sería su reacción, ¿Y si lo rechazaba?, ¿Si entraba en pánico
como en las otras ocasiones?, si volvía
al pasado y…
-Voy
a tocarte…-Anuncio él con voz sedosa antes de alzar su mano-….Voy a tomar tu
mano y entrelazare nuestros dedos, luego voy a besarte.
Y
lo hizo, lo hizo antes de que ella comenzara a gritar. Primero le recorrido el
brazo con las yemas de los dedos, arriba y abaja, hasta que pudo entrelazar sus
manos, luego y con un simple movimiento se inclinó y la beso.
Era
un beso inocente, solo unos cuantos roses, pero eso no evito que Mandy subiera
al cielo y bajara de regreso. Al sentir la suave caricia que le propinaban los
labios de Wrath, todo termino por desaparecer, todo dejo de importar. No le
interesaba su nombre, ni siquiera quienes eran sus padres, lo único que deseaba
era que el siguiera besándola, que la besara toda la vida. Cerró los ojos con
culpa y apretó con fuerza la mano que sostenía al sentir como la nube negra que
estaba escondida en el fondo de su cabeza comenzaba a ceñirse sobre ella. No
quería volver a la pesadilla, no quería recordar el infierno, no cuando Wrath
era el que estaba con ella, tenía que pelear, tenía que ser fuerte.
-No…-Susurro
entre el beso. El la envolvió con su brazo libre entorno a ella al
instante-….No quiero volver ahí.
-No
lo harás…-Respondió Wrath de igual manera-…No te dejare, so yo Mandy, soy yo y
siempre lo seré.
Aquello
fue como un bálsamo para elle ya que al sentir como él la apretaba contra sí,
se dejó ir. Se aferró de igual manera, suspiro entre el beso y luego
correspondió, correspondió con una intensidad inesperada.
Wrath
jadeo al sentir el poder de la respuesta. El beso se estaba tornando duro,
caliente, hambriento y no iba a poder soportarlo mucho tiempo. Si ella seguía besándolo de aquella forma iba
a terminar arrancándole la ropa y eso no podía pasar, no al menos hasta que
pudiera investigar un poco, o pidiera algún consejo de como sobrellevar la
situación.
Intento
separarse, intento estrecharla entre sus brazos y hacerla calmar, pero su
intento no funciono. Mandy profundizo el beso mucho más y lo obligo a
retroceder hasta caer sobre la cama. La fuerza de voluntad de Wrath se evaporo
en el aire al sentir las suaves sabanas en su espalda y el delicado peso de
ella sobre su pecho. La mordió, la acaricio, sintió que iba a morir al
escucharla gemir. Por fin tenía lo que siempre había querido, ella estaba ahí,
entre sus brazos y no podía parar, no quería parar.
-Calma…-La
voz de Wrath se traba momentariamente, lo cual era normal ya que ella había
dejado sus labios para comerse su cuello-…Despacio, no podemos, nosotros…
-Te
amo…-Fue lo único que ella pudo pronunciar-…Te amo.
La
cordura de Wrath o lo que quedaba de ella se fue de su cabeza gracias a
aquellas palabras. Había esperado tanto tiempo para oír eso, había deseado ir
aquello con toda su alma y en ese momento lo tenía, tenía un “te amo”, por
parte de ella, por fin lo tenía. Se separó suavemente y la miro con adoración
después de eso. Al ver aquellos brillantes ojos verdes, se dijo que aquella era
la imagen más hermosa que había visto en su vida, ¿Alguna vez iba a dejar de
amarla como lo hacía?
Mandy
pensó interrumpir el hermoso momento con una palabra imprudente, pero se
detuvo, lo hizo al sentí como él se movía con total delicadeza y se colocaba
sobre ella. El movimiento no fue brusco ni morboso y no supo cómo reaccionar al
respecto. Estaba acostumbrada a la clase de manoseo sucio, pero él estaba
haciendo todo lo contrario. Wrath la acariciaba, lo hacía con la mirada y la
sensación que le provocaba era tan nueva que daba miedo. ¿Aquello era el amor?
-¿Puedes
decirlo de nuevo?
-¿Ah?...-Ella
no podía prestarle atención si él seguía mirándola de aquella forma y jugaba
con las hebras de su cabello-… ¿Decir qué?
-Dijiste
que me amabas, dilo de nuevo…
-Wrath
yo…
-Vamos,
solo una vez más….Quiero grabarlo en mi cabeza, quiero recordarlo cada noche,
por favor.
Pensó
en decirle que no, pensó en inventar cualquier excusa estúpida pero no pudo
siquiera pensar una palabra ya que él hizo algo completamente inesperado. Wrath
estampo sus labios en su cuello por primera vez. La oleada de placer la hizo
lanzar un gemido y aferrar las abanas de su cama con fuerza. Iba a torturarla,
él iba a enloquecerla para así poder obtener lo que quería. Lanzo otro chillido
al sentir unos dientes sobre su carne y unas fuertes manos debajo de su playera
holgada.
“J*dete”,
pensó conforme tomaba aire y se preparaba para gritar lo que él quería
escuchar. Era cierto, lo amaba, ¿para qué abstenerse más tiempo?, era momento
de que él lo supiera, era tiempo de decirlo, era…
-¿Lena?,
¿Estás ahí?
Dos
golpes a la puerta siguieron a las palabras momentos después, obligando a ambos
a salir de su maravilloso tranza. Wrath alzo la cabeza de golpe y se tensó más
que una piedra. Mandy por otro lado rodo los ojos y se tragó la maldición más
horrible de toda su vida. La voz era de Justin y eso no era bueno, nada bueno.
Sin decir alguna palabra y aun presa del pánico alzo sus manos y cubrió la boca
de Wrath, luego tomo aire y aclaro su garganta. Tenía que calmarse, tenía que
tratar de sonar como una adolecente aburrida, no como una completamente excitada.
-¿Amor?
-Si
papá…-Quiso morirse al notar aun los resto de emoción y éxtasis en su voz-…
¿Qué pasa?
-Tu
madre y yo iremos a cenar…-Anuncio-… ¿Quieres venir con nosotros?
-Yo,
bueno…-Wrath negó rotundamente al verla dudar, lo cual la hizo querer golpearlo-…No
papá, no me siento muy bien.
-¿Qué
pasa Mandy?....-La voz de Justin se tornó seria detrás de la puerta, segundos
después la perilla comenzó a moverse-… ¿Estas bien mi amor?, quita el pestillo.
-No
es nada papá.
-Amanda,
abre la puerta…-Ordeno-…No voy a irme de aquí hasta cerciorarme de que estés
bien.
-No
es nada papá, lo juro…-Miro a su alrededor con frustración. ¿Qué rayos podía
decir?-..No es más que un problema hormonal, estaré bien.
-¿Hormonal?...-Justin
sonó completamente incómodo y abochornado-…Puedo llamar a tu madre, ¿Quieres
que lo haga?
-No
papá, no es nada que no haya sentido antes…Vayan a cenar, estaré bien, si pasa
algo prometo llamarles.
-Bien…Te
amo, ¿Lo sabias?
-Si
papá, yo también te amo y mucho.
Hubo
silencio, un silencio preocupante he incómodo, las pisadas de Justin se
escucharon momentos después, estas fueron alejándose poco a poco hasta
desaparecer.
La
puerta principal se cerró 15 minutos después y solo en ese instante Mandy se
permitió volver a respirar. Maldijo después de eso y se dejó caer entre sus
sabanas. Wrath hizo lo mismo, al verse fuera de peligro se derrumbó sobre ella
y escondió el rostro entre su cuello y los mechones negros de su cabellos.
Habían estado a punto de ser descubiertos, habían estado a tan solo una puerta
del problema más grande de sus miserables vidas.
-¿Por
qué “Lena”?....-Pregunto Wrath. Cuando Mandy ladeo el rostro se encontró con
una mirada sonriente y juguetona-
-No
lo sé…-Se limitó a contestar-…Solía llamar a mi madre así y pues….Me parezco a
ella y llevo su nombre de alguna manera.
-Me
gusta.
-A
mí también, pero no querrás decirlo frente a él…-Sonrió estúpidamente y negó
con cansancio-…Tiene la estúpida idea de que solo él puede llamarme así.
-Entonces
será uno más de nuestros secretos.
-¿Secretos?...-Parpadeo
desorientada. Él por su parte se alzó solo lo necesario para verla a los
ojos-…No sabía que ya teníamos uno.
-Amanda
por favor…-Rogo con temor y desesperación-
-Wrath,
mira lo que acaba de pasar….Esto es una señal que nos dice que estar juntos no
es lo correcto, todo esto es un error.
-Dijiste
que me amabas…-Wrath el reto con la mirada. No iba a permitir que todo se
arruinara-…Y eso no es un error porque yo también lo hago.
-Wrath…-Las
palabras se quedaron en el aire un momento. Había tanto que decir-….Vas a
dejarme, tarde o temprano te alejaras de mi…-La imagen de Nicholas se clavó en
su cabeza-…Cuando sepas lo que he hecho me odiaras.
-No
me interesa tu pasado Mandy, me interesa tu futuro….Tu futuro conmigo.
-No
quiero lastimarte.
-Entonces
no lo hagas…-Él alzo una de sus manos y le sostuvo el rostro con ternura-….No
me alejes, no nos alejes, sabes que no podemos soportarlo.
-Esto
es difícil…-La tortura y el dolor era notable en cada palabra-…Siento que no
soy suficiente, siento que no voy a hacer otra cosa más que destruirte.
-No,
te equivocas, tu no me estas destruyendo….Tú me has hecho más fuerte, me has
dado el valor, la seguridad y la fuerza para pelear por lo que quiero y lo que
quiero eres tu…Solo dame una oportunidad, permíteme demostrarte que puedo ser
un hombre, que puedo cuidarte y amarte, permíteme
liberarte de esa estúpida que te dice
que no eres suficiente, solo dame una oportunidad.
Los
ojos de Mandy estaba llenos de lágrimas cuando el término. Lo que sentía la estaba
matando, por una parte quería gritarle que sí, pero por otra tenía un miedo
indescriptible. Él iba a dejarla, lo haría en cuanto se entera de lo que había
hecho con su propio hermano y sabía que no podría soportarlo, pero aun así lo
amaba y deseaba tenerlo, el hecho de que el estuviera con otra la volvía loca,
tenía que tomar una maldita decisión.
Frunció
el entrecejo minutos después y lo miro a los ojos con su ya común expresión
arrogante. Sabía que sufriría con la decisión que había tomado, pero prefería
eso a no haberlo siquiera intentado.
-Te
amo…-Soltó inesperadamente con claridad. Wrath contuvo el aliento y parpadeo
impactado-
-¿Qué?
-Dije
que te amo, querías volver a escucharlo ¿no?
-Eso
quiere decir que…
-Que
esto no será fácil…-Mandy negó con dolor plasmado en el rostro. Aún seguía sin
creer lo que estaba haciendo-…No será fácil, pero vivir sin ti tampoco lo es.
Abrumada
por su declaración lo busco tentativamente con sus manos. Por primera vez lo
toco, nunca lo había hecho antes, no de una forma tan íntima. Le acaricio las
mejillas, para luego hundirle las manos en los rizos de su cabello. Wrath se
inclinó hacia la caricia con devoción y sin poder evitarlo gimió, fue ahí donde
ella se incorporó y lo beso. Fue un beso corto y de cierta forma decente, pero
aun así fue especial, ya que marcaba el principio de alfo que ambos habían
deseado durante mucho tiempo.
*************
Lunes
31
Me siento pérfida y es una
sensación completamente nueva para mí. Antes solía pensar que era invisible,
incluso me sentía así, pero al final del día y aun con toda la diferencia por
parte de las demás personas sabía que existía, en este instante no sé si
existo, no sé si importo, de lo único que estoy segura es, de que me estoy
perdiendo a mí misma, me estoy desvaneciendo lentamente y todo gracias a él.
Gracias a Drew. Probablemente suene egoísta al culparlo de todo lo que me está
pasando, pero es imposible dejar de hacerlo cuando soy presa del miedo. Me he
acostumbrado a pasar desapercibida toda mi vida, luego el aparece y todo
comienza a cambiar. Eh tratado de negarlo, pero después de lo que paso el
sábado supongo que un tanto ridículo hacerlo. Lo quiero, incluso puedo
arriesgarme a decir que lo amo. Su cercanía me ha abierto los ojos, me ha hecho
ver que todo este tiempo he estado equivocada respecto a mis sentimientos, no
era Robert ni el azul de sus ojos el que me hacía sentirme viva, era él, era Drew y su mirada cruel y
carácter frustrante, siempre fue él. Pero ahora todo se ha ido al infierno, sé
que él no me quiere, sé que solo fui un erro, no puedo hacer nada y eso es lo
que me mata, ¿Por qué?, porque tal vez no sea la única que viva las
consecuencias de esta imprudencia, porque tal vez llevo a alguien dentro de mí
en este momento. Un bebe…Un bebe.
Dest
dejo de escribir y cerro la pequeña libreta que estaba sobre sus rodillas
conforme levantaba la vista. No había tocado su diario en al menos 3 años y por
alguna razón, después de aquella mañana en el colegio, lo único que quería era
escribir en el. Suspiro profundamente y se recargo en el tronco del árbol que
estaba a su espalda, luego simplemente concentró su atención en el hermoso
atardecer que estaba frente a ella.
Ver
la puesta del sol desde tierra era hermoso, pero verla desde lo alto era mucho
mejor y eso era lo que hacía en ese momento. Había escalado uno de los árboles
que estaban alrededor de la cabaña de la finca con la esperanza de escapar de
todos su problemas. Su abuela se lo había dicho una vez, “Cuando quieras
olvidarte del mundo, solo ve el atardecer, piérdete en sus colores y en su
calidez” y funcionaba, estando ahí arriba, en completa paz, solo existía ella,
solo ella.
Se
quedó sumergida en sus propios pensamientos unos minutos, todo comenzó cuando
el sol estaba a medio camino de esconderse. Los arbustos en tierra comenzaron a
moverse y la obligaron a esconderse. Se camuflajeo entre las ramas restantes
del árbol y rezo por no ser descubierta. Si su padre o alguna otra persona se enteraban
de que se encontraba ahí y sobre todo en un maldito árbol estaba literalmente muerta. Cerró
los ojos y contuvo el aliento, tal vez no era nadie, tal vez era solo el aire
o…
-Eres
un hijo de put*… ¡Un maldito hijo de put*!
Los
ojos azules de Des se abrieron de par en par al escuchar la exclamación. Conocía
aquella voz, la tenía grabada en cada rincón de su cabeza. Con sumo cuidado
movió una de las ramas del árbol y observo hacia abajo. Era Drew, él estaba
ahí, su sospecha era cierta. Paso saliva y golpeó su cabeza un par de veces
contra la corteza del árbol. ¡Que mierd*s estaba haciendo él ahí!, ¿Acaso la
espiaba?. Frunciendo los labios entorno la mirada y se concentró en el. Se
había dejado caer en la hierba, tenía la cabeza entre las rodillas y repetía
algunas palabras que no lograba comprender. La preocupación comenzó a hacer
efecto en ella y se odio por eso. Él la había lastimado, la había tratado como
una vil prostituta y aun así se preocupaba por su bienestar, ¿Por qué no podía
ser una chica normal?
“Lo
mejor es que te vayas”, se dijo a si misma tras algunos segundos. Y si era lo
mejor. Por alguna razón sentía que Drew necesitaba estar solo, él se miraba
destrozado y no se sentía muy cómoda observándolo.
Tomo
su diario y lo acomodo dentro de sus pantalones, luego simplemente observo el
panorama. La altura era considerable, pero había subido con facilidad lo cual
significaba que la bajada sería igual ¿no?. Rodo los ojos y sujeto una de las
ramas, no iba a acobardarse en ese momento, era lo suficientemente lista como
para bajar de un árbol completamente ilesa.
Descendió
con lentitud y sumo cuidado, al principio todo fue perfecto. La dificultad se
presentó a medio camino, justo cuando su pie izquierdo se atoro en una pequeña
grieta de corteza. La retención la hizo trastrabillar hacia atrás y perder el equilibro.
Desesperadamente manoseo y se aferró a la primera cosa sólida que encontró,
pero lamentablemente la paz le duro poco ya que al estabilizarse algo llamo su
atención. Hubo un ruido, un leve chasquido y luego todo sucedió…
La
rama que se encontraba a sus pies se trozo tomándola completamente
desprevenida. Lanzo un grito de horro al verse suspendida en el aire, lo único
que la separaba del suelo era la fuerza de su brazo derecho, el cual sostenía
una enorme rama que colgaba sobre su cabeza. Gimió dolorosamente al sentí como
su mano comenzaba a resbalar, iba a morir iba a morir si no lograba
estabilizarse. Con los ojos llenos de lágrimas y el nerviosismo en cada parte
del cuerpo comenzó a balancearse, si lograba tomar la rama con su mano
izquierda podría trepar de nuevo, solo necesitaba un poco de fuerza,
necesitaba…Grito, grito lo más fuerte que pudo y cerro sus ojos al no soportar
más su peso y terminar por soltarse. Se preparó para el dolor y se imaginó todo
lo que le esperaba en el hospital. Lo último que pudo hacer antes de desmayarse
fue decirse estúpida una y otra vez.
-Por
favor Dest, no me hagas esto…Por amor de dios Destiny, despierta… ¡Despierta
maldita sea!
Las
palabras sonaban lejanas en la cabeza de Dest, pero aun así las escuchaba. Alguien
la llamaba y podía jurar que ese alguien estaba a punto de echarse a llorar
mientras lo hacía. Entre la bruma y el dolor de cabeza pudo distinguir el dolor
y la desesperación de aquella voz, ¿Había muerto?, ¿Estaba en el hospital?
No
supo cuánto tiempo trascurrió antes de
poder abrir los ojos, pero le pareció una verdadera eternidad. Lo primero que
noto al volver en si fue una luz, una centellante luz que estaba justo sobre
ella. Por un momento creyó que en verdad había muerto, pero la teoría se desborono
al sentir un intenso y familiar dolor en todo el cuerpo. Necesitaba insulina,
lo cual para su desgracia significaba que seguía viva. Tuvo la intensión de
mover una de sus manos, pero el esfuerzo no funciono, no tenía fuerza, estaba
completamente desecha. Fue ahí cuando la voz del principio volvió y con ella
llego algo más, un suave tacto, aquella persona le sostenía la mano. Trato de
enfocar la vista, trato incluso de ladear la cabeza, pero solo consiguió dolor,
un maldito y torturador dolor.
-No,
no te muevas…-Le susurraron-…Solo quédate quieta hasta que pueda llamar una
ambulancia.
¡No,
no, no!, grito en su interior y como protesta comenzó a alterarse. Solo
necesitaba insulina, solo eso, nada de ambulancias ni médicos. Tomo aire y
después de una lucha interminable fue capaz de mover los labios. “Un poco más”,
pensó. Solo un poco más.
-¿Qué?
-Insulina…-Murmuro
roncamente-…Insulina en mi mo…Mochila.
No
tuvo la menor idea de lo que paso después. Todo fue demasiado rápido, lo único
que sintió fue como el dueño de la voz se separaba de ella unos minutos y el
pinchazo de la jeringuilla momentos después. Todo comenzó a tener sentido
después de la inyección. El dolor bajo y la orientación volvió, aun así no se
atrevió a moverse hasta que pudo recordar por completo parte de lo que había
pasado. Conforme lo hacía noto algunas cosas. La primera, estaba sobre una
cama, una cama cómoda…La segunda, había un olor en el aire, un olor sumamente
familia.
-¿Estas
mejor?
Asintió
tras la pregunta y sin poder contenerse más abrió los ojos de golpe. La mirada
despiadada de Drew la esperaba con ansías al hacerlo, toda la fuerza que había
recuperado se esfumaron al verlo. Él estaba furioso, incluso más que eso, él
tenía la misma expresión que había optado en la pelea con el fotógrafo. ¿Por
qué tenía la extraña sensación de que estaba en problemas?
-Ammmm,
¿Hola?
-¿Hola?,
¡Eso es lo único que tienes que decir!
Drew
grito, grito con fuerza he ira, lo cual la hizo estremecer. Él estaba peor de
lo que se había imaginado. Se incorporó con lentitud en la cama y trato de
decir alguna palabra, pero él no tenía ninguna intensión de escucharla y se lo
dejo en claro cuando se puso de pie. Al verlo pasearse uno y otra vez por la
habitación pudo reconocer el lugar donde estaba. Las paredes, el piso, el olor
a madera, todo era familiar, estaban en la cabaña, el había podido entrar en la
cabaña si la maldita llave. Se arrastró hacia la orilla de la cama y toco el
suelo con los pies, debía salir de ahí lo más rápido posible, lo último que
necesitaba en ese momento era tenerlo cerca.
-¿Sabes?,
es suficiente…Voy a hablar con tu padre sobre esto, sobre todo…Con este
espectáculo me he dado cuenta de que no puedo confiar en ti.
Las
palabras frías y monótonas la detuvieron a medio paso de la cama. ¿Qué mierd*s
quería decir el con eso?. Drew la encaro segundos después y le dedico una
mirada vacía, justo como las que le había dado a su regreso. La miraba como si
no la conociera, como si fuera una persona más en su vida y eso le dolió.
Estaba acostumbrada a ver aquel brillo en sus ojos, aquella ¿Admiración? y en
ese instante no había nada, absolutamente nada.
-¿Qué
quieres decir con eso?
-¿Acaso
no es obvio?...-El sonrió irónicamente y observo a su alrededor-…Le diré todo,
desde lo que paso entre ambos, hasta este estúpido escondite.
-Estas
demente si crees que te lo permitiré….-Dest sonrió de igual manera y camino
hacia el con lentitud-… ¿Sabes?, en todo este tiempo he dejado que te
escabullas en mi vida de muchas maneras y no pienso hacerlo más…Estoy harta de
que violes mi privacidad, no voy a permitir que destruyas la única cosa buena
que me queda…Este lugar es lo más importante que tengo ahora y no me lo
arrebataras, ¡No eres nadie para hacerlo!, ¡No tienes ningún maldito derecho
sobre mí!
Drew
dio un paso hacia ella con el cuerpo completamente tenso y la asesino con la
mirada. Quiso gritarla que se equivocaba, quiso restregarle en la cara que
lamentablemente era suya y no había nada que pudiera cambiar eso, pero se
detuvo, detuvo sus estúpidas intensiones al recordar las palabras que Mandy
había dicho. Se remarcó una y otra vez que tenía que darle espacio, se dijo que
tenía que dejar de presionarla, pero aquellas órdenes eran completamente
irrelevantes mientras tuviera la imagen de ella completamente lívida en la
cabeza. Verla caer de ese maldito árbol y tenerla fuera de sí en sus brazos
había sido un maldito infierno, había sido morir de un millón de formas ¿Y aun
así ella se ofendía?.
Negó
un par de veces y hundo las manos en sus bolsillos, aquella chiquilla estaba
muy equivocada si creía que se iba a deshacer de él, eso no pasaría, no pasaría
nunca, no después de saber que le pertenecía, que le pertenecía a él y a nadie
más.
-¿Qué
demonios estabas haciendo arriba de ese árbol?...-Pregunto con dientes apretados
al verla tomar su mochila-… ¡Acaso quieres romperte el cuello!
-No,
no realmente…-Contesto con simpleza y altanería-…Aun no me has hartado tanto
como para desear eso.
-No
estoy jugando Destiny.
-¿Y
quién dijo que yo lo hacía?
-¿Lo
hiciste deliberadamente?...-Drew bajo la vista hasta el suelo. No quería pensar
en cosas estúpidas, pero la actitud de ella no le daba para más-… ¿Quieres
deshacerte del niño?, ¿Es eso?
Destiny
se quedó paralizada a 5 metros de la puerta de la habitación. Las palabras le
retumbaron en la cabeza segundos, minutos, no lo supo, de lo único de lo que
fue consiente fue de ella moviéndose hasta estar frente a él. Cuando Drew alzo
la vista hizo algo que jamás había hecho en toda su vida. Alzo la mano y lo
cacheteo. Él se quedó quieto al recibir el golpe, no se tensó, ni siquiera
parpadeo, durante todo el tiempo la miro, la miro con la misma intensidad que con
la que ella lo hacía. Dest no bajo la mirada, al contrario se mantuvo firme y
decidida, lo hizo aun cuando sintió como algunas lágrimas le caían por las
mejillas. Aquello había sido el colmo.
-Eres
un completo imbécil…-Escupió ella entre el sentimiento y las lágrimas-…Podría
decir mucho más pero tendría que insultar a tía Selena y ella no se lo
merece…-Drew siguió sin moverse, lo único que podía hacer era mirarla-…Estoy
harta de este tema del “Bebe” y al igual estoy enferma de que me creas una
maldita inhumana…¿Sabes?, puede que las demás tipas con las que te hayas
revolcado sean de esa manera pero yo, yo no lo soy…Tal vez cometí el error de
dejar que me tomaras como un animal, pero tengo dignidad, dignidad, respeto y
sobre todo amor…Si yo quisiera deshacerme de mi supuesto hijo lo hubiera hecho
desde el domingo en la mañana, creo que tengo el dinero suficiente para
hacerlo…
-Dest...
-¡Cállate!...-Destiny
volvió a lanzar un golpe. El solo cerro los ojos al recibirlo en el pecho-…Todo
esto me tiene enferma y agotada, esa es la maldita razón por la cual estaba
arriba de ese árbol…No puedo soportarlo más, esto es suficiente, todo se está
cayendo a pedazos…-Se quedó sin palabras de un momento a otro, segundos después
suspiro entre el llanto-…Mi madre a comenzado a mirarme extraño y no puedo
soportarlo….Y por si eso fuera poco le he arruinado las vacaciones con mi padre,
¡Sus put*s vacaciones Drew!, me enferma ser una carga para las personas y en
este momento es lo que soy…Soy una carga para mis padres, para mis hermanos y
para ti.
-No
eres una carga para mi….-Musito Drew con los ojos cristalinos. Iba a llorar
como una pequeña niñita si no se controlaba-...No lo eres.
-¿A
no?, entonces dame una razón… ¡Solo una maldita razón del por qué estás aquí!
-Porque
te quiero…-Soltó. Sentía que el corazón estaba en su garganta-…Estoy aquí porque
te quiero.
-----------------------------------------------------------------------------------
Odienme :)
Jajajaja aquí esta chicas....Se que al igual tarde, pero ya me siento mucho mejor, estoy en mi casa, como cosas solidas, puedo estar en mi celular mas de 5 horas, así que eso significa caps mas seguidos...Ahora, por "seguidos" no quiero decir cada 3 días, primero porque las ideas no apararen tan rápido, segundo por que me gusta dar oportunidad de que todas las personas que leen la novela puedan hacerlo capitulo por capitulo y con calma....Pero tengan por seguro que la espera a partir de ahora sera menos.
Las quiero chicas, les agradezco su paciencia :)
Ese Drew es todo un loquillo <3