Drew se removió en
su cama a la mañana siguiente y lo único que pudo pensar era en que jamás se
había sentido tan relajado como en ese momento. Tomando fuerza y gruñendo, se
movió hasta quedar de espaldas en su cama, ya ahí simplemente cruzo los brazos
sobre sus ojos y suspiro.
Había tenido un
sueño extraño, extraño y fantástico, aunque algo perturbador. Jamás en sus 20
años de vida había soñado que tenía sexo con alguien y mucho menos que
disfrutaba al hacerlo. Sonrió sínicamente aun con los brazos en su cabeza.
Nunca disfrutaba del sexo no importaba como, cuando o con quien lo hiciera,
pero aquella vez había sido diferente, lo había disfrutado, había deseado
incluso más. Moviendo los brazos y mirando hacia el techo, hizo un esfuerzo
sobre humano para recordar el rostro de la chica. Las imágenes eran borrosas,
solo había pequeños cortometrajes y en ellos el rostro de su compañera estaba
vacío.
Llamándose “Loco”,
desistió a la idea y se irguió en la cama, después de todo el sexo nunca había
sido importante y seguiría sin serlo. Alzo los brazos y estiro cada musculo de
su cuerpo, se detuvo al notar una pequeña cosa inusual. Estaba semi desnudo,
sus pantalones y bóxers estaban a sus tobillos y su, su “cosa” tenía una
especie de ¿Pintura roja?. Negando y desnudándose por completo se preguntó el
que diablos había hecho la noche anterior. Recordaba la cita con Dest y lo mal
que había salido, recordaba su charla sobre las drogas y el sexo. Maldijo y se
puso de pie. Eso era, se había largado la noche anterior y había hecho su
mierd* con alguna chica fácil.
Camino hacia el
baño ignorando el desorden que había en su habitación, ya ahí se metió en la
ducha
y abrió el grifo de
agua fría. Jadeo al contacto y comenzó a lavarse. Al frotarse los brazos y llegar
al tatuaje de su pecho un destello paso por sus ojos, vio a Dest y su mirada
seria y segura, aquella mirada que lo volvía loco. Sonrió con ternura y deslizo
la mano de su pecho a su entrepierna. Pensó en ella mientras se lavaba aquella
parte en especial, recordó la forma en que lo había hecho sentir, la manera en
la que ella le sonreía y….Paro en seco su “acción indecente” y cerró los ojos
con fuerza, estaba volviendo a pensar estupideces, estaba volviendo a
comportarse como un chico norma y él no lo era. Nunca podría ser feliz, nunca
podría tener a Destiny ni a una chica que se le acercara apenas un poco.
Cerro el grifo del
agua y apoyo la frente en el frio azulejo de la ducha unos segundos, al
calmarse tomo una toalla y la ajusto a su cintura. Salió del baño y camino
directo a la habitación de nuevo, estuvo a punto de elegir unos bóxers cuando
algo llamo su atención. Lo que parecía ser un trozo de tela rasgado estaba en
el suelo. Se movió hacia él y lo tomo entre sus manos. Parpadeo impactado al
tomar conciencia de lo que aquello era. ¡Ropa interior!, ¡Había ropa interior
femenina en su habitación!. Un temor le recorrió la columna. ¿Había llevado a
la chica a su habitación?, ¿Se había revolcado con ella dentro de la casa de
sus padres?, paso saliva y sin soltar aquella prenda se irguió y trato de
recordar mucho más, pero en ese piso algo que lo hizo tambalearse. Maldijo y
miro el objeto con odio, pero aquel sentimiento no duro mucho al identificarlo.
Una jeringuilla, una de sus jeringuillas estaba en el piso. Bufo y paso su mano
libre por el rostro antes de agacharse y tomarlo, ¿Qué rayos había pasado la
noche anterior?, Que demonios había….
La serie de
imágenes brutales y asquerosas que se impactaron en sus ojos al tocar la
jeringa hicieron que todo en su cabeza se borrara. Todo surgió como lava
ardiente de un segundo a otro, el humo se disipo y el rostro de la chica
apareció. Destiny llorando, Destiny
implorando que parara, Destiny acorralada debajo de él, eso era todo lo que
podía ver. Sin poder evitarlo sus piernas perdieron la fuerza y lo hicieron
caer, se llevó las manos a la cabeza después de eso y golpeo. Golpeo una y otra
vez para que las imágenes grotescas desaparecieran, pero no lo hacían solo se
intensificaban aún más. Jaloneo su cabezo con fuerza y tomo bocanadas de aire.
Aquello no podía ser cierto, él no era un monstruo, no uno tan horrendo, se
negaba a creer que hubiera podido abusado de ella.
Temblando y con
lágrimas en los ojos se puso de pie y camino entre tambaleos hacia la cama. Paso
una mano por la suave tela y eso solo hizo que más imágenes repugnantes se
agruparan en él. Se llevó la mano a la boca para no gritar en el momento que
vio una mancha obscura que sobresalía del negro de las sabanas. Era sangre, le
había hecho daño, la había lastimado.
Todo su ser entro
en una especie de shock después del aquel descubrimiento y solo pudo pensar en
una sola cosa, necesitaba verla, necesitaba encontrarla, necesitaba asegurarse
de que estaba bien y suplicar perdón antes de matarse así mismo por ser una
repugnante bestia. Soltó lo que sus manos sostenían y corrió hacia su
guardarropa. Tomo lo primero que encontró y salió hecho un maniaco de la
habitación.
Interrumpió en la
habitación de Mandy pero esta estaba vacía, luego siguió con la de Nicholas,
incluso la de sus padres pero todas estaban igual que la primera. Gruñendo y
ahogando un gemido desesperado bajo las escaleras trotando. Lo único que
necesitaba era verla, solo quería tocarla y disculparse. Limpio sus lágrimas
antes de entrar al comedor, lo que daba lo mismo ya que nadie le prestó
atención. Busco con frenesí a la persona indicada pero no consiguió
absolutamente nada, en la habitación solo estaban su padres, Mandy y Wrath.
Todos desayunaban ajenos a lo que había pasado y eso lo hacía rabiar. Deseaba
que lo supieran, deseaba poder gritarlo, así su maldita atrocidad no quedaría
impune.
-¿Dónde está
Destiny?
No reconoció su
propia voz, sonaba vacía, desorientada. Los demás tampoco lo hicieron ya que lo
miraron y el semblante les cambio por completo. Justin fue el primero en
ponerse de pie y caminar hacia él. Drew no retrocedió como siempre lo hacía, en
ese momento solo le importaba una sola cosa y no tenía nada que ver con su
padre.
-Hijo…
-¿Dónde está
Destiny?...-Insistió con más ferocidad. Justin le tomo el hombro-
-Drew sabemos lo
que paso, está en televisión.
-¿Qué?
-La pelea con el
fotógrafo, está en televisión…Pero no te preocupes llamé a mi abogado y…
-Me importa una
mierd* lo que hallas hecho…-Drew cerró los ojos y lucho por no echarse a llorar
en ese instante-…Solo quiero saber dónde está Destiny…. ¡Donde demonios esta!
-Fue a casa…-Todos
miraron a Wrath. Al sentir la mirada del Drew el chiquillo solo pudo encogerse
de hombros-…Me despertó antes de que amaneciera, dijo que necesitaba ropa
limpia y hacerse cargo de unas cosas…Dijo que iría a casa.
Eso fue suficiente,
todo el mundo dejo de importar para Drew y solo se dedicó a una sola cosa y eso
fue correr.
Salió de la casa
dando un portazo y se aventuró por el sendero que daba a la carretera. No tenía
motocicleta, estaba consciente de ello pero no le importaba correría, correría
las distancias que fueran necesarias solo para verla.
La casa de los
Jonas estaba a tan solo medio kilómetro de la suya pero aun así el camino que recorrió
le pareció una maldita eternidad. Al llegar al jardín delantero de la casa de
Dest sus tendones se quemaban como carbones y su garganta estaba tan seca que
podía escupir sangre, pero aun así siguió corriendo, lo hizo hasta estar frente
a la puerta.
Destiny
por otro lado casi cae sobre su trasero al escuchar el azote de la puerta
principal. Enredo una toalla alrededor de su cuerpo después de eso y salió de
su cuarto de baño entre titubeos. Se suponía que la casa estaba sola y seguiría
así hasta el día siguiente. Suspiro y cerró los ojos con fuerza antes de
caminar hasta el espejo de su tocador. Sus padres no podían haber regresado
antes, no podían verla de aquella manera. Las facciones cansadas y tristes que
se reflejaban en el espejo le dejaban claro que necesitaba tiempo, tiempo para
asimilar y esconder bien todo lo que había pasado. Si su padre o madre la veían
así, con ojeras, ojos hinchados y marcar rojizas en los antebrazos, comenzarían
a preguntar y ¿Qué podría contestarles?
Tal vez
un “Tuve sexo, un horrible y torturador sexo”, pensó con irónica y aborrecían.
Aun no podía creer todo lo que había pasado o probablemente se negaba a
hacerlo. Era doloroso descubrir la verdad, era doloroso vivir una realidad que
no era mágica ni hermosa. Los libros he historia mentían, el sexo no era lindo
y jamás lo seria, el sexo no era más que un maldito acto vacío y doloroso, una
acción que jamás en su vida volvería a vivir.
Lanzo
una maldición y se llevó las manos a la
cabeza al volver a recordar la forma en la que había salido de la cama donde
había dormido. Lo había hecho como lo hacía una maldita put*, había recogido
los pedazos de su dignidad y salido por la puerta en completo silencio y lo peor
de todo era que se sentía culpable, culpable por haberlo hecho. Sabía que
debería de odiar a Drew después de lo que había pasado, después de lo que había
hecho pero no podía hacerlo, no cuando tenía grabada su mirada y aun sentía la
maravillosa pero corta sensación que le había hecho sentir al final de su
“gloriosa” primera vez.
No podía
negarlo, no cuando se había pasado toda la noche pensando en ello, estaba
enamorada de Drew, del chico que la había tratado como una cualquiera. Tembló
involuntariamente y tuvo que sostenerse del tocador. Aquello era aterrador, sumamente
intimidante, pero ella lo había dicho alguna vez, el amor se trataba de eso, el
amor era un miedo inexplicable justo como el que sentía en esos momentos. Pero
lo peor del caso no era estar enamorada de alguien indebido, lo peor era no ser
correspondida.
Abrió
los ojos de golpe y observo a su reflejo con hostilidad. Drew no la amaba, ni
siquiera la aprecia. ¿Cómo sería capaz de sobrellevar las cosas después de lo
que había pasado?, volviera a sufrir, igual que lo había hecho con Robert.
Sonrió tristemente sin poder evitarlo tras el recuerdo del hermoso chico que
aún era su novio y inevitablemente comenzó a llorar. ¿Cómo había podido ser tan
asquerosa?, ¿Cómo había podido engañarlo de esa manera?, ¡Cuando demonios había
dejado de estar enamorada de él!
El
sonido de la puerta de la habitación de sus padres la hizo reaccionar y emitir
un jadeo. Sin duda alguna habían vuelto y tendría que afrontar la realidad una
vez más. Se limpió las lágrimas con el dorso de la mano y acomodo la toalla que
cubría su cuerpo mucho más. No había vuelta atrás.
-¿Papá?...
¿Mamá?...-Alzo la voz solo lo suficiente para ser escuchada-…Salgo en un
segundo, solo voy a…
La puerta de la
habitación se abrió antes de que terminara de hablar, dejándola completamente
pasmada en el lugar donde se encontraba. Drew estaba en el lumbral al parpadear
y se miraba enfermo, enfermo y devastado. Sus ojos estaban muertos, estaban
vacíos, el color verde había perdido todo brillo, era como si no tuviera alma.
Pensó en preguntarle si estaba bien, pero no lo hizo, en lugar de eso
retrocedió, retrocedió lo más que pudo.
-Que estás haciendo
a…
Él no la dejo
terminar, no le importo nada, ni siquiera el dolor que se expandió por su pecho
al verla alejarse, dio tres zancadas y aun temblando la abrazo con toda la
fuerza que le quedaba. Ella estaba desecha, sus ojos la delataban y todo era su
maldita culpa. La aplasto más contra sí y hundió la nariz en su cabello húmedo.
Cerro los ojos al notar que se había dado un baño, probablemente ella quería
borrar todo recuerdo o rastro de la noche anterior.
-¿Puedes soltarme
por favor?...-El dolor volvió a golpearlo al escucharla-…Todo me duele, por
favor, suéltame.
Lo hizo, la soltó a
regañadientes, luego de eso se separó solo lo suficiente para mirarla. Estaba
cubierta por una toalla, ¡Solo por ese maldito pedazo de tela!. Quiso asesinarse así mismo al sentir como un
deseo inexplicable aprecia en su interior al verla. No tenía derecho a sentir
aquello, no era más que una maldita bestia, ella no era suya, tenía que dejar
de ser un maldito imbécil.
-¿Cómo
entraste?...-Dest hablo sin mirarlo a los ojos.-
-Forcé la
puerta…-Susurro secamente como respuesta-
-Vaya, perfecto….
¿Sabes?, pudiste haber tocado.
-No lo pensé.
-Lo sé, créeme lo
sé...No sueles pensar mucho…-Rodo los ojos y le dio la espalda-… ¿Qué haces
aquí?, necesito cambiarme así que...
-Dest por favor…-La
voz de Drew tembló tan notoriamente que ella no pudo evitar mirar sobre su
hombro-…Yo, yo solo…Lo siento, en verdad lo hago, yo no quería…
-Si vienes a
disculparte, puedes irte…No me interesa.
-Destiny…
-Está bien Drew,
todo está bien…-Murmuro conteniendo la rabia. Era increíble, se arrepentía, ¡El
se arrepentía de todo!-…No importa.
-¡Por supuesto que
importa!...Destiny lo que paso…
-No necesito tu lastima…-Lo
encaro después de eso. El parpadeo y titubeo un poco-…Soy consciente de lo que
paso y lo suficientemente adulta para afrontarlo, estamos bien ¿Entiendes?,
ahora por favor sal de mi habitación, necesito vestirme.
-No lo entiendes.
-Sí, si lo hago…Te
arrepientes de haberte acostado conmigo, ¡Lo entiendo!, no necesito tu
compasión, podemos ahorrarnos todo este numerito, solo vete, ¡Vete!
El dolor y la
desesperación de Drew se tornaron ira y frustración al escucharla. ¿Cómo podía
ella decir eso?. Si, probablemente era un maldito cerdo asqueroso y un
sinvergüenza pero no se arrepentía, no de haberse acostado con ella. No
recordaba mucho de la noche anterior, pero aun así sentía algo en el pecho,
algo que le aseguraba que lo que sea que había pasado entre ellos era todo
menos un error. De lo que se arrepentía era de su maldita estupidez, de la
forma en la que habían pasado las cosas, de…
La imagen de los
brazos de Dest captaron su atención en ese instante he inevitablemente fue
perdiendo la poca paciencia y cordura que le quedaba. Había marcas, enormes
marcas rojas y moradas en aquella piel blanca. Un recuerdo corrió por su
cabeza, después de eso solo pudo observar sus manos con asco. Las ganas de
echarse a llorar como una niñita volvieron a parecer, la había lastimado, lo
había hecho con sus propias manos.
-Tienes que irte.
Alzo la cabeza al
escuchar y se encontró con una nueva imagen de ella. Había cambiado la toalla
por una enorme bata de baño que cubría las marcas de los brazos. Frunció los
labios con tanta fuerza que probó un poco de sangre. Nada de lo que ella
hiciera lo haría olvidar Absolutamente nada.
-Drew…
-No voy a ir a
ninguna parte, así que has lo que quieras…-Mascullo viéndola con amargura-
-Necesito vestirme.
-Pues hazlo, creo
que es demasiado tarde para tener “pudor”.
-No, no lo
es…-Destiny agacho la cabeza y le imploro a dios que le diera fuerza para no
echarse a llorar-…Después de todo, ni siquiera me viste desnuda…-La declaración
hizo que Drew se pusiera más tenso que un muro de concreto. Ella negó aun
cabizbaja-…Pero comprendo, ¿Quién necesita desvestirse lenta y
románticamente-…-Rio con sorna-…Todo es mejor cuando él se baja los pantalones
y rasga la ropa interior de la chica que tiene en su cama…Mucho más práctico y
sobre todo rápido.
-Basta…-Imploro el
comenzando a temblar de nuevo-…Basta Dest.
-Oh cierto, estas
arrepentido y supongo que no quieres que te recuerde la noche más horrible de
toda tu existencia, bien, entiendo…Pero ¿sabes? Tienes razón, es demasiado
tarde para algunas cosas…Así que seguiré tus sabios consejos.
Después de eso ella
dejo caer la bata de baño que la cubría, luego y tras mirarlo con altivez
comenzó a caminar por la habitación como si el no estuviera cerca.
Drew solo pudo
contener el aliento al verla. Ella estaba desnuda, completamente desnuda justo
frente a sus narices y no podía hacer nada. Paso la lengua por sus labios en
cuanto sintió como una punzada le atacaba la entrepierna, lamentablemente el
deseo y la excitación le duro poco. Todo lívido y placer se evaporo de su
cuerpo al notar las diversas y pequeñas marcas que ella tenía alrededor del
cuerpo. No eran marcas ocasionadas por la administración de insulina, eran
marcas ocasionadas por él. Las marcas de sus dedos estaban plasmadas en la
cintura de Dest, también había rasguños en su abdomen y algunos moretones en su
pecho. Alejo la vista de inmediato y tomo aire pausadamente. Ella lo estaba
torturando, ella lo estaba asesinando cruel y despiadadamente….
-Tenemos que ir a
un hospital…
-Estas demente ¿cierto?...-La
miro al escucharla hablar. Destiny estaba tensa y lo miraba como si hubiera
dicho una estupidez conforme subía unos Jeans por su piernas-…Es completamente
ridículo y aunque lo necesitara no lo haríamos… ¿Tienes idea del drama que nos
rodea en este momento?, la escena de ayer esta en todos los noticieros…Somos un
maldito blanco andante.
-Me interesa una
mierd* lo que seamos…-Drew paso una mano por su despeinado cabello y trato de
ser razonable-…Estas lastimada y necesitas ser valorada.
-No necesito
nada…-Ataco ella poniéndose una camiseta y negando a la vez-…Deja de molestar,
está hecho, estoy bien.
-¿Así?...-Los ojos
del el brillaron por la impaciencia-…Entonces dime, ¿De dónde provino la
sangre?
-¿Disculpa?
-Había sangre en
mis sabanas….Si se supone que estas “bien”… ¡Dime de donde mierd* provino!
-Estas bromeando
¿cierto?...-El cuerpo de Dest se crispo al verlo parpadear y no pudo evitar
hervir de rabia. ¡El malnacido le estaba tomando el pelo!-… ¡Vete al infierno
Drew!
Trato de correr
hacia la salida, pero el intento fue en vano ya que él la tomo del brazo y la
obligo a mirarlo. Se estremeció por completo al verlo a los ojos. ¿Cómo podía
ser tan imbécil como para preguntarle esa clase de cosas?, ¿Acaso quería
dejarla sin la poca dignidad que le quedaba?. Él sabía perfectamente de donde
provenía su flujo sanguíneo, el solo quería burlarse de ella más de lo que ya
lo había hecho.
-¡Suéltame!...-Exigió
ella jaloneando su brazo-… ¡Aléjate de mí!
-¿Por qué debería
hacerlo?....-Drew la sostuvo con mucha más fuerza y gruño-…Tu no lo hiciste
cuando te lo pedí…Te rogué que te alejaras, te lo suplique y no lo hiciste….
¡No lo hiciste!
-Yo solo quería
ayudarte.
-¿Ayudarme?....
¡Solo hiciste que te hiciera daño!
-Vaya, ahora todo
es mi culpa.
-¡Si, si lo
es!...-Drew grito tan fuerte que la garganta le dolió-…Si te hubieras ido, si
me hubieras hecho caso...Yo no…
-¿No qué?...-Dest
se separó de él y lo miro con lágrimas en los ojos-… ¿No me hubieras tratado
como una put*?....Pues sabes, es muy tarde para eso, lo hiciste y está bien,
probablemente yo tengo la culpa…Aclarado el tema, ¡Quiero que te largues!, no
quiero verte nunca más… ¡Nunca!
-¿A no?...-El
contuvo el aliento, aquellas palabras se habían clavado en su pecho
profundamente. Estaba viviendo su mayor pesadilla, ella se estaba
alejando-…Pues lamente decirte que eso no se va a poder…No puedo dejarte sola.
-¡Y por qué no!
-Por qué podrías
estar embarazada.
Drew se quedó
paralizado al hablar. Había evitado la idea en todo el camino, pero era momento
de afrontarlo y más si ella quería alejarse por completo. Si, la idea de un
bebe lo aterraba, pero si aquella era la única forma de seguir viéndola al
menos 1 hora cada día estaba dispuesto a afrontar sus actos como un hombre.
Dest por otro lado se quedó quieta y parpadeo como si aquellas palabras no
fueran importantes.
-Tu “razón” para no
dejarme en paz es ridícula…-Fue lo único que pudo decir. Drew jadeo
asombrado-…Déjate de tonterías.
-No es una
tontería….-Aseguro con voz tensa. ¿Qué parte no entendía de que podía estar
embarazada?-…Yo no me cuide, yo no…
-Aun así es estúpido…-Ella
sonrió y negó con aburrimiento-…No estoy embarazada.
-¿Y cómo rayos lo
sabes?
-Lo sé porque los
bebes se hacen con amor…-Ambos se miraron a los ojos. Él quiso echarse a llorar ahí mismo-…Y en lo que tú y yo
hicimos no hubo eso, no hubo nada….Dios no puede ser tan cruel como para crear
una vida con un acto como el de nosotros.
-Los bebes se hacen
con Sexo Destiny…-Drew cerro los puños con fuerza al hablar. Ella era cruel, no
estaba acostumbrado a verla así-…Y quieras aceptarlo o no tu y yo tuvimos
Sexo…Así que no te dejare sola hasta estar seguros de que nosotros no…
-Eres un imbécil
Drew…-Escupió Dest secamente-…Dijiste que el Sexo era solo un maldito acto
vacío, dijiste que no te importaba…Y aun así estas aquí, invadiendo mi maldita
privacidad…Déjame sola Drew, ambos sabemos que no te importa.
Todo el sistema de
Drew se preparó para comenzar a gritar. ¿Cómo se atrevía a decir que toda
aquella situación no le importaba?. Ella era la única persona que no lo había
juzgado en al menos 4 años. Ella había sido dulce, comprensiva, tierna y por un
maldito error iba a perderla. ¡Como rayos no iba a impórtale algo así!.
El teléfono de la
habitación comenzó a sonar frenéticamente, cosa que Destiny agradeció. Estaba
harta de toda aquella situación, lo único que deseaba era que él se alejara y
la dejara en paz. Eran demasiadas emociones, demasiados problemas. Querida
escapar, huir, alejarse de todo el maldito mundo incluyéndolo a él. Se dio
vuelta rodando los ojos y camino hacia su mesita de noche hasta poder contestar
el maldito teléfono.
-¿Hola?...-El mundo
termino de caerse en pedazos al escuchar la voz de la persona que estaba del
otro lado del teléfono-… ¿Papa?...Si, si estoy bien…Yo solo….Si pero… ¿Están en
casa de tía Selena?
No pudo evitar
mirar sobre su hombro al hablar. Noto perfectamente como Drew se tensaba mucho
más de lo que ya lo estaba. Aquello solo complicaba mas las cosas. ¿Qué le iba
a decir a sus padres?, ¿Cómo iba a comportarse?, ya no era la misma chica que
ellos habían dejado el viernes por la mañana, aquella chiquilla había muerto,
lo había hecho pocas horas atrás.
-Papa
cálmate…-Logro murmurar entre el pánico-…Estoy en casa, solo vine a buscar ropa
limpia, voy para allá ahora mismo…Si, si estoy bien…Dile a mama que no se
preocupe….Bien, nos vemos en unos minutos.
La tensión exploto
en toda la habitación al colgar. Ambos se miraron con la misma expresión
desesperada. Estaban hundidos en un gran problema y no había forma de salir de
ahí. Dest fue la primera en moverse. Tomo las llaves de su auto y una de sus
chaquetas. No había otra opción más que encarar de la situación y eso era lo
que haría sin importar lo que pasara.
-Vamos,
camina…-Ordeno. Drew paso saliva y la observo pasar por un costado-
-¿Qué vamos a
hacer?...-Pregunto con voz pausada conforme la seguía por el corredor-
-Nada.
-Destiny…Tengo que
hablar con tu padre, tenemos que decirle lo que paso.
-No, no tenemos que
decir nada.
-Pero si estas
embarazada…
-¡No lo estoy
Drew!...-Grito Dest justo en las escaleras. ¡Por qué demonios no dejaba de
repetir eso!-…No lo estoy y métetelo en la cabeza…No vamos a decir nada, nadie
va a saberlo…Seguiremos con nuestras malditas rutinas normales.
-Sabes que no
podemos hacer eso, no después de…
-¿De qué?... ¿De
tener Sexo?...No soy un caso especial Drew, solo soy una chica, justo como las
otras…Tu lo dijiste ayer, es lo mejor…Nos lo agradeceremos mutuamente en el
futuro, ya verás.
No, no iban a
agradecerse nada y Drew podía asegurarlo en 15 idiomas diferentes si lo
deseaba, pero no lo hizo, a comparación de eso simplemente la miro alejarse.
Era una pesadilla, toda aquella situación lo era y si era sincero consigo mismo
debía aceptar que no sabía si podría soportarla.
*************
-Nadie va a tocar a
tu muchacho Bieber, no después de lo que hizo por Dest….Antes tendrán que pasar
por mis malditos huesos.
Mandy rodo los ojos
tras el dramatismo innecesario del padre de su mejor amiga, luego y tras
suspirar lo suficientemente fuerte como para llamar la atención de todos
comenzó a caminar hacia la cocina.
Si, sabía que
probablemente el problema en el que estaba metido Drew era un poco grabe, pero
aun así veía completamente innecesario tanto escándalo. Lo único que había escuchado
desde que había abierto los ojos aquella mañana eran gritos y más gritos. Primero
de su padre, luego de su madre, Drew había seguido después y para finalizar
estaba su tío Nick, el cual había llegado con un teléfono en mano y no dejaba
de impartir órdenes a un sinfín de personas.
Sonrió torcidamente
conforme abría la nevera y hurgaba un poco. Había problemas más importantes en
el mundo como para hacer una revolución por una estúpida pelea con un fotógrafo
como por ejemplo el hecho de que estaba enamorada de un niño de 16 años y que
él le correspondía. Lanzo una risita tonta al sentarse en la barra de desayuno
y comenzar a abrir una botella con jugo de naranja. Ese si era un problema
impórtate y sus padre deberían de saberlo después de todo lo que habían vivido.
Aún seguía sin entender como su madre no había enloquecido, como había
soportado tanta presión. “Podrías hablar con tu madre sobre el tema” le dijo una vocecita en su cabeza. Tomo un
largo trago del líquido de su botella y asimilo la idea. ¿Podía?, probablemente
sí pero sería difícil, después de todo no había sido una chica abierta desde el
“incidente” en Canadá.
-Hay un drama ahí
afuera, ¿Cierto?
Mandy parpadeo
noqueada al ver a su madre entrar en la cocina, después solo maldijo al maldito
al destino por ser cruel y traicionero. Aun no había tomado una maldita
decisión y ¡Pum!, ahí estaba la mujer que le había dado la vida. Paso saliva y
miro sus manos un momento, ¿Cómo debía comenzar con conversación?, era
ridículo, completamente patético, ¡No tenía la menor idea de cómo hablarle a su
propia madre!
-Ma… ¿Mamá?...-Tartamudeo
notoriamente-
-¿Si?
-¿Puedo preguntarte
algo?
-Claro… ¿Qué pasa?
-Bueno yo…Yo me
preguntaba…-Cerro los ojos y suspiro. “Solo di lo primero que te venga a la
cabeza, vamos, vamos”-… ¿Tu y papá tuvieron Sexo antes de casarse?
Selena dejo caer el
plato que lavaba en el fregadero, luego solo miro a su hija con una expresión
aturdida y ruborizada. Amanda se llamó estúpida al instante y considero
seriamente la idea de salir corriendo. ¿Por qué había dicho eso cuando tenía un
montón de opciones?, se preguntó antes de ponerse de pie y comenzar a caminar
hacia la salida. Si era sincera consigo misma no le importaba en lo más mínimo
saber cuándo sus padres habían tenido sexo por primera vez, en realidad era
algo repulsivo, pero era la primera cosa en la que había pensado, era…
-¿En verdad quieres
hablar de eso?....-Selena hablo con calma. Mandy miro sobre su hombro y trato
de no ruborizarse-
-Sí, bueno
no…-Maldijo internamente. ¿Por qué todo tenía que ser tan difícil-…Yo solo
quería saber un poco más de la historia que tienes con papa.
-Y… ¿Necesariamente
tenemos que concentrarnos en el sexo?
-No,
definitivamente no…-Amanda vio a su madre tomar asiento con una sonrisa y eso
la tranquilizo un poco, tal vez la idea funcionaria-…Solo que quisiera
comprender el cómo pudiste estar con el de una forma tan íntima sin sentirte
asquerosa.
-Oh, creo que
entiendo, es de nuevo el tema de la edad…. ¿Por qué te preocupa tanto una cosa
tan simple?
-No es simple mamá.
-Por supuesto que
si…-Los ojos negros de Selena se entornaron, segundos después suspiro-…Solo
tienes que aceptar tus sentimientos, aceptarte a ti misma.
-¿Y qué pasa si no
puedo aceptarme a mí misma?....-Ambas se miraron a los ojos. Aquella era una
clara revelación de lo que pasaba.-…Eh tratado mamá, pero no puedo…Por más que
intento solo me puedo ver como una arpía asquerosa.
-¿Él sabe que te
sientes de esa manera?...-Mandy negó rotundamente. Sel rodo los ojos he hizo
una expresión infantil-… ¿Y por qué no se lo dices?
-¿De que serviría?
-¡Dios!, pensé que
habías heredado mi inteligencia además de mi belleza pero veo que no.
-¡Mamá!
-Se trata de
confianza Amanda, tienes que confiar en la persona que amas, así el podrá darte
confianza sobre ti misma…Si se lo dices él podrá ayudarte a superar toda
inseguridad…Tu padre me ayudo y mucho, me hizo ver la única verdad que había
entre nosotros y esa era que nos amábamos sobre todas las cosas.
-No lo sé
mamá…–Dudo-
-Tomara tiempo…Pero
si hablas con el chico será todo mucho más sencillo.
-¿Y podre tener
sexo con él?
-¡Selena Amanda
Marie Bieber!...-Selena exclamo el nombre completo de su hija con exasperación
conforme el rubor volvía a cubrirla. Mandy solo pudo encogerse en la esquina
donde estaba-
-No es necesario
todo el nombre mamá…-Murmuro avergonzada-…Sabes que lo odio.
-En ese caso, no
seas tan imprudente.
-Solo quiero saber
si alguna vez seré libre de amar a alguien sin sentirme una basura.
-Bien,
bien…-“Desventajas de ser madre”, pensó Sel aun incomoda-…Si, supongo que
podrás hacerlo, el secreto está en el amor Amanda…Si se aman podrán hacer lo
que les plazca y no sentirás más que felicidad…Si, probablemente estarás en
shock las primeras veces, pero pasara rápido.
-¿Tu estuviste en
shock?
-Si…-Se sinceró,
luego sonrió levemente-…Lo cual era extraño, después de todo yo no tenía
experiencia alguna y aun así me sentía una abusiva de niños.
-¿Qué quieres decir
con “No tenía experiencia”?
-¿Tu qué crees?
-¿Tu qué crees?
-Oh…-Las mejillas
pálidas de Mandy se volvieron rosáceas, después solo tocio unas cuantas
veces-…Entiendo.
-De cualquier forma
el miedo e incomodidad paso rápido, después solo pude sentir…
-Da da da…-Selena
sonrió al ver como su hija se cubría los oídos
y negaba con la cabeza-…No necesito saberlo, créeme.
-Tu comenzaste con
las preguntas…-Se escudó con sorna-…Así que aguántate.
-¿Puedo preguntar
algo más?
-Soy tu madre hermosa,
puedes preguntarme lo que quieras cuando desees.
-Bien…-La seriedad
volvió a invadir a Amanda, luego y tras pensar unos minutos hablo-… ¿Te
arrepientes de haberle revelado tus sentimientos a papá?
-No…-Contesto Sel
al instante y sin titubear siquiera-…Si soy sincera esa es la mejor decisión
que he tomado en la vida…Gracias a eso fui una persona amada y feliz, sin
contar que pude crear a dos hermosos hijos, lo cuales me enorgullecen.
Selena sonrió
ampliamente al terminar de hablar, después simplemente se puso de pie y regreso
a lo que estaba haciendo antes de ser “entrevistada”.
Por otro lado Mandy
no pudo evitar querer llorar. Nunca había tenido una relación cercana con su
madre, pero por alguna razón, en aquel instante, se sentía como si ambas fueran
una sola. Aquella mujer había vivido en carne propia lo que ella sentía en ese
momento y había sobrevivido, así que podría hacerlo al igual. Sería como su
madre, tomaría la valentía y decisión que llevaba en su sangre y las haría
renacer, dejaría el pasado atrás, no más miedo ni misterio, no más negación a
sus sentimientos, comenzaría a hacer las cosas bien y lo haría desde ese
momento.
Titubeando camino
hacia donde su madre estaba, ya ahí le toco el hombro para llamar su atención,
cuando por fin aquellos ojos negros se posaron en ella hizo algo de lo que se
había privado en 4 años. La abrazo. Selena
se quedó paralizada unos segundos, pero correspondió, lo hizo sin dudarlo,
aquello era una de las cosas que había deseado hacer durante mucho tiempo.
-Vaya…-Susurro Sel
aun con los brazos alrededor de su hija-…Debería de darte consejos más seguido.
-Te quiero
mamá…-Mandy alzo la cabeza con seguridad y trato de sonreír-…Sé que no suelo
decirlo, pero aun así te quiero.
-Lo se amor, lo he
sabido siempre…Después de todo eres igual que yo ¿No?
Ambas pudieron
quedarse ahí horas su hubieran deseado, pero el sonido de la puerta principal
las hizo separarse. Selena suspiro y paso una mano por su cabello con
desesperación, señal que Mandy comprendió. Era hora de volver a él drama.
-Pero que mierd*
Dest no pudo evitar
balbucear las palabras al entrar al salón principal de la casa de sus tíos y
encontrarse con una escena sacada de una película de policías. Tanto su padre
como Justin hablaban por teléfono y caminaban por toda la habitación como
verdaderos maniacos, había papeles en todas partes y la televisión, la
televisión trasmitía el incidente del día anterior.
Gimió internamente
y cerró los ojos sin poder evitarlo, ¡Estaba en televisión!, todo el mundo en
ese momento sabía lo que había pasado la noche anterior o al menos parte de
ello. Se llevó las manos a la cabeza y respiro hondamente pausadamente. Aquella
era su peor pesadilla, volvería a ser el “hazme reír” de todos, la poca paz que
había creado durante aquellos años se estaba derrumbando bajos sus propios ojos
y no podía hacer nada para cambiarlo.
-Dest…Amor, ¿estás
bien?
La voz seria y
serena de su padre la hizo alzar la cabeza. Ahí estaba él, él hombre que más
amaba en el mundo, la persona que más necesitaba en ese momento. Los ojos se le
llenaron de lágrimas al instante, por un momento pensó en mentir, probablemente
un “estoy bien” serviría, pero no tuvo fuerzas, no podía hacerlo, así que solo
hizo una cosa y eso fue correr hacia al hombre que le había dado la vida.
Las lágrimas
comenzaron a resbalarle por las mejillas al sentir aquellos brazos familiares
alrededor de ella. Lloro por todo, por la humillación, por el dolor, la tristeza,
por Drew. Se aferró a su padre mucho más tras el recuerdo de aquel chico.
Estaba destrozada y tenía miedo, mucho miedo, tenía que aceptarlo, se había
mostrado fuerte tras la confrontación de horas atrás pero la verdad era otra,
la verdad era que se estaba muriendo por dentro y la idea de un embarazo no
ayudaba. Drew tenía razón, los bebes se hacían con sexo y posiblemente estaba
embarazada. ¿Qué iba a hacer?, ¡Qué demonios podía hacer!
-Está bien
princesa…Esta bien…-Nick susurro las palabras conforme mecía a su niña-…Estoy
aquí, no voy a dejarte, nadie va a hacerte daño.
Las dulces palabras
fueron tranquilizando a Dest, tras algunos minutos pudo dejar de llorar, fue
ahí cuando analizo más a fondo su alrededor. Su madre estaba en el sofá con
Ronnie en brazos, tenía una expresión que nunca había visto, parecía colérica,
enfadada, era como si estuviera a punto de explotar. Nicholas y Wrath estaban
de pie al final de la habitación y su semblante era parecido al de su madre.
Justin, Selena y Mandy se mostraban serios y preocupados, literalmente estaban
pálidos, todo por ella. Todos estaban alterados por su culpa.
-¿La situación en
mala?
-Si…-Miley hablo
antes de que Nick lo hiciera y miro a su hija con compasión-…La noticia comenzó
a trasmitirse ayer a media noche…Queríamos volver pero no había vuelos
disponibles.
-¿Qué tan expandida
esta?
Justin frunció los
labios tras la pregunta de Dest, segundos después le acerco unos cuantos
periódicos. Ella se quedó paralizada al leer los encabezados. En todos ellos se
leían cosas horribles, pero para su sorpresa no eran sobre ella sino sobre
Drew. Con manos temblorosas y sin separarse de su padre tomo una de las hojas
del diario y leyó cada palabra. Lo soltó con desprecio al terminar y
simplemente paso saliva. Nada de lo que decía aquel artículo era verdad, Drew
no se había lanzado sobre el fotógrafo intencionalmente, él la había defendido,
él era inocente.
-Mienten…-Aseguro
Dest con acides y asco-…Drew no es culpable, el me defendió, el…
-Lo sabemos, lo
sabemos…-Nick la interrumpió con ternura, luego solo suspiro-…Lamentablemente
han interpuesto una denuncia, ellos quieren llevarlo a juicio.
-Pues detenlos…-La
desesperación estaba comenzando a dominarla-…Habla con tus abogados, ¡Haz algo!
-Lo haremos, juro
que lo haremos, pero tenemos que tomarlo con calma…El expediente de Drew no
ayuda mucho a la situación.
-¿A qué te
refieres?
-No es la primera
vez que Drew tiene problemas Dest…-Justin menciono las palabras con visible
tensión. Ella parpadeo desorientada-…Los abogados del maldito fotógrafo
buscaran cualquier cosa de que aferrarse.
-¿Qué pasa si
pierden el caso?...-Pregunto con miedo. Nadie contesto lo cual la hizo comenzar
a temblar-… ¿Papá?
-Lo más probables
es que quieran transferirlo de nuevo a Alemania…-Contesto Nicholas en voz
baja-…Querrán reformarlo en un nivel superior y…
“No”, fue lo único
que pudo pensar Dest. No iba a permitirlo, Drew Bieber no regresaría a ese
maldito infierno, no importaba como, pero iba a impedirlo. Tomo fuerza y miro
hacia la entrada del salón, sabía perfectamente que él estaba ahí. El corazón
se le partió en muchas más partes al verlo, había miedo en sus ojos, un miedo
crudo y denso. Contuvo las ganas de correr a abrazarlo. Toda relación con el
había terminado aquella noche pero aun así seguía queriéndolo lo cual era
suficiente para defenderlo hasta que no le quedara aliento. Nadie iba a tocarlo
de nuevo, nadie volvería a lastimarlo y mucho menos por una maldita estupidez
como lo era golpear a un fotógrafo.
-Vamos a ganar
esto…-Aseguro con la mirada aun puesta en él. Drew la miro con fiereza y algo
más en sus ojos-…Y yo sé cómo hacerlo.
-Destiny creo que…
-No papá…-Nick
guardo silencio tras la mordacidad de su hija. Momento después Dest tomo
aire-…Iré a dar mi declaración, soy un testigo, estuve ahí, no podrán contra mi
testimonio ni con mi maldito dinero.
-Hija, no creo que
puedas soportar estar en una corte…-Miley trato de ser razonable y comprensiva
al hablar-…Tendrás a un montón de fotógrafos sobre ti, salir será difícil y…
-No me interesa…Voy
a hacerlo.
-¡Tu no harás nada!
Drew alzo la voz o más
bien grito y capto la atención de todos. Destiny se puso a la defensiva de
inmediato y se separó de los brazos de su padre. Estaba harta de que él le
diera ordenes, estaba cansada de que decidiera por ella, si quería pelea la tendría,
no le importaba si la odiaba, estaba vez seria ella la tomara la decisión.
-Hare lo que se me
venga en gana….-Dest camino hacia él y lo encaro sin miedo-…Y no vas a
impedirlo aunque lo desees.
-No vas a meterte
en esto…-Mascullo Drew conteniendo su ira-…Te mantendrás alejada de este
maldito problema.
-No soy tan frágil como
piensas…-Lo reto con la mirada-… ¿No te ha quedado claro aún?
-Si haces esto
nunca te lo perdonare.
-Pues es un precio
que estoy dispuesta a pagar…-Ambos se miraron tensamente-…De cualquier forma
todo se ha destruido entre nosotros.
El murmullo apenas
audible de Dest fue para Drew como un grito ensordecedor, un grito que lo hizo
despertar la furia que tenía dentro. ¿Aquellas eran las reglas? Pues jugaría,
lo haría como lo había hecho en el pasado, si a Destiny Jonas no le interesaba
en lo más mínimo lo que habían vivido a él tampoco.
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¿Les han dicho alguna vez que son impacientes chicas?
Jajajaja amo sus comentarios, escriben como si llevara años sin subir
Las quiero chicas, déjenme saber lo que piensas, saben que sus comentarios, elogios, criticas y amenazas de muerte son muy bien recibidas.